Ya tenemos la cámara, el trípode, el fondo… en la entrada anterior hicimos un repaso al equipo que necesitamos para tomar buenas fotografías de producto, y ya vimos que no hace falta ni un estudio super profesional ni gastarnos un dineral en una cámara que nos permita tomar esas fotografías. Hoy vamos a seguir con nuestra guía para conseguir fotografías de productos ideales para tu tienda online.

Si no sabes mucho de fotografía es posible que encargarte tú de un punto tan crítico en una e-commerce como las imágenes del producto te intimide un poco, pero créenos, conseguir unos resultados suficientes es algo relativamente "sencillo". Ten presente que las imágenes de producto para una tienda online no requieren de mucha resolución en comparación de la necesaria para impresión. De hecho, hemos hablado anteriormente de cómo hacer las fotografías de producto para una tienda online desde el móvil en caso de que no tengas una cámara e incluso hemos contado qué móviles son los más adecuados.

Lo más importante es que le pongas ganas e interés en dar lo mejor de ti. Al fin y al cabo, son los productos de tu tienda online. Tu eres el primer interesado en que se muestren lo mejor posible para facilitar las ventas.  😉

Suigamos entonces!

Iluminación y fondo

Si vas a usar una caja de luz, la clave es colocar los focos a una distancia que ilumine todo el costado de la caja, de forma que la tela distribuya la luz de forma que caiga de forma homogénea sobre todo el producto. Una lámpara a cada costado será suficiente, aunque también puedes añadir una más desde arriba.

Si vas a recurrir a la cartulina para generar el efecto de fondo infinito, recuerda colocarla de tal manera que no se doble formando una esquina, sino que quede redondeado. Usa cinta o celo para fijarlo a la pared y a la mesa y coloca el producto en el centro de la parte plana.

Además, lo más adecuado es colocarlo de forma que todo el set quede en un ángulo de 90 grados con respecto a la ventana –colocando una cartulina de foamcore al otro lado para que rebote la luz-. También es recomendable apagar el resto de luces.

En la mayoría de ocasiones se usa un fondo blanco o negro, pero también se pueden usar de otros colores si quieres jugar con diferentes combinaciones o recurrir a la psicología del color.

Evita que la luz del sol llegue directa al producto, saca las fotos a una hora que no incida de forma directa en la ventana. Si quieres experimentar, puedes variar la posición del set con respecto a la luz. Un garaje puede servirte para tomar fotos con mucha luz trasera.

Prepara la cámara

Ahora que ya tienes el set preparado es hora de configurar la cámara para tener los mejores resultados. Según qué cámara uses, especialmente si usas la de un smartphone, puede que algunas de las siguientes opciones no aparezcan. Sin embargo, lo más adecuado es lo siguiente:

•      Balance de blancos (WB) en auto.
•      Flash apagado.
•      Dispara en formato RAW si es posible, si no, en JPEG.
•      Selecciona el tamaño de imagen más grande que puedas.
•      También la mayor calidad o resolución que te permita.
•      Selecciona el ISO en 100 (es la sensibilidad del sensor - como ya tienes buena luz no hace falta aumentar el ISO así minimizamos el ruido).

Si tu cámara te lo permite, selecciona le modo manual. Lo mejor que puedes hacer es seleccionar un número f mediano F/8 o F/10, lo que te dará una profundidad de campo adecuada y te permitirá enfocar de forma más sencilla y selecciona la velocidad adecuada para que quede correctamente expuesto. Muchas cámaras tienen un modo Av, que te permite seleccionar la apertura (el número f) y ajustan de forma automática la velocidad.

Si vas a usar un smartphone para tomar las fotos, te bastará con tocar el punto que quieres que quede correctamente expuesto. Con el modo automático de exposición es posible que tengas que corregir algo (un punto o punto y medio) en la edición, pero es algo muy sencillo de hacer.

Esta foto que propongo la he hecho desde mi cámara con una óptica específica de producto, un 60mm. 

Esta segunda foto que propongo está hecha desde mi móvil. Me doy cuenta de que se ve un poco "distorcionada" por la perspectiva y lente de la cámara (se ve ensanchada por el medio), pero a pesar de ello me parece decente para mostrar en una tienda online. Se ve el producto claro y limpio. Estoy seguro que se podría hacer mejor contando con más tiempo 😉  

Por otro lado, recuerda no usar nunca el zoom digital (el que tienen la mayoría de teléfonos y muchas cámaras compactas), ya que lo que hace es ampliar la imagen de forma digital perdiendo mucha calidad y normalmente pixelándola. Si tienes zoom óptico, procura acercarte todo lo posible, así eliminarás la distorsión causada por el angular de la lente.

¡Y haz pruebas! No tengas miedo a intentar fotos desde otros ángulos o con una iluminación distinta. Si algo bueno tiene la fotografía digital es que no estamos limitados a los carretes que tengamos, y te servirá para ver qué funciona, qué no y a conocer bien los límites de tu cámara y de tu equipo.

Por último, te quedará retocar las imágenes. Lo más recomendable en este caso es usar Photoshop, aunque hay otros programas que te pueden servir. Dentro de poco dedicaremos una entrada a la edición de fotografía de producto, no te la pierdas.

Espero que esta entrada os haya servido para que podáis conseguir fotografías de productos ideales para una tienda online.

¡Hasta la próxima!