Las plataformas de reserva online de restaurantes (eltenedor.es, Restalo, Clubkviar, Atrápalo etc.) se han convertido en una alternativa más para darse a conocer y conseguir clientes en el día a día. Algunas funcionan mejor que otras, pero la dinámica es más o menos la misma. ¿Funcionan bien? ¿compensa trabajar con ellas? Te lo contamos:

Ventajas de las webs de descuentos de restaurantes

Las plataformas de reserva online presentan algunas ventajas con respecto a las de compra colectiva: por un lado, la comisión suele ser fija por comensal y da algo más de margen al restaurador. Segundo: este tipo de webs incluyen opiniones que se mantienen en el tiempo, lo que es muy importante para tu reputación. Tercero: son muy intuitivas y suelen contar con buenas apps, con lo que puedes cazar clientes por el hecho de “estar cerca” en el momento preciso. Cuarto: al menos Eltenedor y Restalo, que yo sepa, ofrecen sistemas de gestión de reservas a los restaurantes, herramienta que tengo que decir que veo muy útil.  Por último, promocionan continuamente a los restaurantes y, si tienes suerte de ser uno de ellos, tendrás bastante visibilidad.

Pero, antes de lanzarte a la aventura de los descuentos, queremos que tengas en cuenta algunos aspectos:

1. Antes de ofrecer un descuento, piensa en si te sale a cuenta

Muchos restaurantes, desesperados por darse a conocer o porque las ventas no van como esperan, se dejan seducir por el reclamo del éxito de estos portales sin pensar si realmente van a obtener beneficio. Antes de lanzarte, tienes que pensar en cuáles serán tus márgenes y no te olvides de la comisión que les tienes que pagar además del descuento. Si ves que no te salen las cuentas, plantéate hacer la promoción como una inversión temporal para darte a conocer en el portal, reduce el descuento o, directamente, piensa en otras vías de promoción.

2. Establece cupos

Si vas a ofrecer una promoción, establece cupos: no puede ser que se te llene el restaurante con clientes que te aportan un margen de beneficio mínimo o nulo, porque, si no ¿Dónde está el negocio? Que tengas el restaurante lleno no significa que estés ganando dinero, tenlo bien presente.

3. Ante todo, honestidad

Aunque no todos son así, he detectado al menos 3 tipos de restaurantes tramposos en estas webs de descuentos:

El que da menos comida o de peor calidad

Como no le sale a cuenta, ya se lo monta el para que le salga: o da la mitad de comida que a un cliente normal u ofrece alimentos de peor calidad. Tengo que decir que, lo siento, pero la gente no es tonta y, si ve que le engañas, se indignará y lo contará. Todos conocemos ejemplos o lo hemos padecido.

El inflaprecios

Un restaurante que ofrece supuestamente comida que vale 50€ con un supuesto 50% de descuento, quedando el precio final en 25€. Cuando el cliente va al restaurante, se da cuenta de que esa comida vale realmente 25€. Esto tiene dos inconvenientes: si el descuento solo lo hace a través de los portales y en el restaurante tienes los precios habituales, la gente se enterará y lo acabará contando, lo que dejará tu reputación a la altura del betún.

Si, por el contrario, el restaurador mantiene los precios altos, se quedará sin comensales presenciales y vivirá hipotecado a las plataformas de reserva de por vida. Otros optan por indicar directamente en el restaurante que realizan el descuento, pensando que, así, todo el mundo sentirá que puede disfrutar de la “ventaja”. Si un usuario llega por una web y se lo encuentra a la puerta, se sentirá estafado igual. Eso no es un descuento, es un reajuste de precios con engañifa de por medio.

El que no aplica el descuento a casi nada

Los postres no entran, las bebidas no entran, tales platos no entran… Jopé, vaya rollazo. Recortan tanto las posibilidades que al final el cliente pasa del descuento o el sorpresón llega en la factura. Para el restaurador ok, pero el comensal acaba bastante cabreado. Con razón.

¿Cuál es la solución?

Ofrece solo el descuento que te puedas permitir. A mí, la verdad, me dan más confianza los descuentos del 20% y el 30%. Si, por algún casual te puedes permitir hacer un 40% o un 50% de descuento de manera prolongada, antes de ofrecerlo, me plantearía si estoy ofreciendo una buena calidad precio y, en caso de que sí, pensaría en ajustar los precios para ser más competitivo. De esta manera, quizá lleguen más clientes de manera natural, sin tener que recurrir a descuentos agresivos ni comisiones.

Entonces ¿merece la pena darse de alta?

El darse de alta en este tipo de portales lo veo muy aconsejable. Es totalmente gratuito, tienes otra referencia tuya en internet y, si trae algún comensal, estupendo. Estos sitios, además, funcionan como auténticas guías de restaurantes, con lo que mucha gente acude a ellas cuando no sabe dónde cenar. ¿Ofrecer descuentos? Bien, siempre dentro de lo que puedas permitirte y, si ofreces algo que no te sale a cuenta, que sea temporal y a modo de inversión. Nunca, ni por asomo, intentes estafar a tus clientes, porque se acabará sabiendo.

Como último apunte, me gustaría aconsejarte que, si quieres hacer promociones y descuentos, lo hagas también en tu propio establecimiento. Días que tengas más flojos, combinaciones de platos, menús especiales… Trata de irlas cambiando cada cierto tiempo para que la gente no se habitúe y pierda el interés y, sobre todo, no las tengas tooodos los días, ya que eso no es una promoción, es un ajuste de precios, como decíamos antes. Sobre este tipo de promociones tendrás tú el control y, el dinero que te gastarías en comisiones, puedes emplearlos en comprar flyers, adwords o unos buenos carteles para la entrada de tu restaurante.

Por último, recuerda que, por muchas ofertas que hagas, no hay mejor promoción que un cliente satisfecho 🙂