No importa la experiencia que se pueda tener dentro del diseño web. Dos de los términos que más se escuchan son los de UX, experiencia de usuario, y UI, interfaz de usuario. Sin embargo, no todas las personas saben cuáles son las principales diferencias entre un término y otro.

Por ello, y debido a la importancia que tienen estos conceptos dentro del mundo digital, lo que vamos a hacer a continuación es establecer precisamente eso. Las diferencias que hay entre UX y UI.

¿Qué es hablar de UX?

Hablar de la experiencia de usuario es hablar de todo lo que el internauta siente durante el proceso de navegación por un determinado sitio web. Unas sensaciones que no solo se pueden circunscribir a un único dispositivo sino a todos los que tenemos disponibles a día de hoy como puedan ser los smartphones o las tablets.

El concepto de sensaciones, e incluso de sentimientos, cobra un papel muy importante. En la experiencia de usuario, no se trata de llevar a cabo una determinada acción con más o menos éxito. De lo que se trata es de la satisfacción del usuario una vez que lleva a cabo esa acción.

En consecuencia, la experiencia de usuario no se logra de la noche a la mañana, gracias a una interfaz sencilla o a unos colores agradables. De lo que se trata es de realizar pruebas de todo lo que se nos pueda llegar a ocurrir. Unas pruebas que requieren no solo de una gran de cantidad de recursos humanos sino también de una gran cantidad de recursos a la hora de analizar las posibles respuestas. Los usuarios, cada día son más y tienen unas exigencias no solo mayores sino también mucho más cambiantes que hace unos años, entre otras cosas, a causa del aumento de la competencia y la madurez del propio usuario.

La experiencia de usuario empieza desde el momento en que una persona hace una búsqueda, entra en una web, navega, resuelve (o no) su necesidad bien sea comprando, suscribiendo a una newsletter o consumiendo contenido. De esa manera, se le hace seguimiento y se le fideliza para que vuelva a nuestra web y se convierta, con suerte, en fan.

Depende del objetivo de la web y de lo que se le quiera ofrecer a la audiencia, la experiencia de usuario a plantear puede ser totalmente diferente.

¿Qué es hablar de UI?

Como seguramente sabrás, la interfaz es el medio que permite al usuario interactuar con el sitio web. Por eso, en esta propia definición encontramos la principal diferencia con respecto a la UX. Y es que mientras que la UX es un todo, la UI es solo una parte.

Como nos podemos imaginar esto no quiere decir que el diseño de la interfaz no sea importante. Nada más lejos de la realidad. Tal es así que de hecho el éxito o el fracaso de un sitio web, por muy importante que pueda ser la marca que lo respalda, puede depender directamente del diseño de la interfaz. Más que nada porque un diseño desafortunado puede dar lugar a comprar sin terminar, registros que no se llegan a realizar o pagos que se cancelan en el último momento por no quedarle al usuario claros algunos aspectos del mismo.

La clave está en la adaptación del todo

Sea como fuere, lo cierto es que todo lo que rodea tanto a la UX como a la UI, está sujeto a cambios continuos. Unos cambios que no solo tienen que ver con los resultados obtenidos sino también a otros como puedan ser las tendencias. Un diseño no es válido de por vida. Mientas que hace unos años podía servir casi cualquier cosa ya que había pocos sitios web y todos funcionaban bajo un ordenador personal, esto hoy en día no sucede.

Hay que adaptarse a los nuevos tiempos. Actualmente los dispositivos móviles son los que dominan la escena digital. La información que se busca tiene que ofrecerse en pocos segundos porque los internautas cada vez tienen menos tiempo para navegar por un sitio web. Los menús tienen que ser sencillos y el camino hasta encontrar lo que el usuario desea debe ser lo más corto posible.

Y todo ello sin contar todo lo que tiene que ver con las pasarelas de pago. Si antes se utilizaban las tarjetas hoy en día podemos pagar a través de plataformas como PayPal, Bizum e incluso con criptomonedas. Es por ello por lo que se puede afirmar que un sitio web que no adapte su UX y su UI a todos estos aspectos está condenado al fracaso.