Si has estado buscando información sobre el mundo de la programación de aplicaciones en los últimos meses, posiblemente hayas leído repetidamente sobre las progressive web apps, aplicaciones web progresivas o PWAs por sus siglas en inglés, y puede que en algún lado hayas leído que son la solución al eterno debate entre las aplicaciones nativas y las aplicaciones web. Hoy os vamos a explicar qué son y cuáles son sus ventajas y desventajas.

Primero un poco de historia: la idea original que tenía Steve Jobs para el iPhone es que todas las aplicaciones fueran web, que se anclaran desde el escritorio pero funcionasen desde la red. Esta idea pronto se vio que era poco práctica, ya que en aquel momento había una gran cantidad de limitaciones técnicas que hacían que su uso no tuviera ni punto de comparación con las nativas: ni el diseño, ni la velocidad de carga, ni las funcionalidades. Cuando la AppStore llegó un año después del lanzamiento del iPhone, las aplicaciones nativas tomaron el mundo al asalto y Android llegó a las tiendas ya con su Market.

Qué son las progressive web apps

Las progressive web apps son una tecnología promovida por Google que busca fusionar lo mejor de los dos mundos. Aprovecha el lenguaje HTML5 y las conexiones mucho más veloces de la actualidad para ofrecer una carga comparable con la de una aplicación nativa. Se fundamenta en los siguientes pilares:

• Diseño responsive, con animaciones CSS que simulan ser una app nativa.
• Service workers, un proxy entre el dispositivo y el servidor que pueden ejecutarse de forma independiente y en segundo plano, lo que permite por ejemplo funcionar hasta cierto punto sin conexión o con la aplicación cerrada.
• App Shell, un patrón que básicamente separa la creación de la app entre la funcionalidad y el contenido, de forma que se pueda cachear los elementos funcionales para que pueda usarse off-line y por otro lado el contenido que llegue, este sí, desde la web.

Ventajas

• Son apps seguras.
• Funcionan con (casi) cualquier navegador.
• Son responsive, se adaptan a cualquier tamaño de pantalla.
• Funcionan off-line.
• Están permanentemente actualizadas.
• Se pueden encontrar a través de los motores de búsqueda.
• Se pueden enlazar a través de una URL.
• Se pueden "instalar" anclándolas al escritorio de tu móvil.
• Pueden enviar notificaciones push e incluso funcionar en segundo plano, facilitando mantener el engagement con el usuario.

Desventajas

• Se trata de una tecnología en desarrollo, por lo que todavía hay navegadores que no son compatibles ni sabemos qué aceptación tendrán en un público acostumbrado a las apps nativas.
• No tienen acceso a todas las funcionalidades del teléfono, como los contactos, calendario o NFC.
• A día de hoy, iOS no soporta este tipo de aplicaciones, y ese es posiblemente el gran obstáculo en su camino. Apple está comenzando a trabajar en ello, pero no se sabe hasta qué punto permitirá todas sus funcionalidades como el segundo plano o las notificaciones.

¿Son las apps del futuro?

No cabe duda de que se trata de una de las tecnologías más prometedoras del momento y que su potencial es enorme, incluso hay quien cree que pueden llegar a adelantar a las aplicaciones nativas. Sin embargo, también tienen ciertas limitaciones a día de hoy y el hecho de que no estén disponibles para iPhone limita enormemente la audiencia. Si Apple decide apostar por esta tecnología será un paso enorme para las PWAs, pero tampoco hay que olvidar que se trata de un standard apadrinado por Google, su gran competidora, por lo que tal vez no quiera ponérselo fácil.

Se trata de una alternativa muy interesante a las apps tradicionales, si bien a día de hoy su uso es algo limitado, no solo por el hecho de que una parte tan importante del mercado como es el iPhone no las incorpore, sino por el hecho de que el usuario medio está muy educado para descargar apps nativas, pero no tanto para anclar webs a su escritorio. ¿El futuro será diferente? Es muy posible.

Espero que esta entrada os haya servido para entender qué son las progressive web apps y si os sale a cuenta apostar por ellas.

¡Hasta la próxima!