Varias veces han llegado a nosotros clientes potenciales pidiendo presupuesto para desarrollar una tienda online. Con todas las funcionalidades que te puedas imaginar y hasta el mínimo “accesorio” para su perfecta puesta en marcha. Claro, mientras más compleja es la tienda más tiempo requiere y mayor es la inversión para el desarrollo.

Una vez el cliente ve el presupuesto se asusta y se echa para atrás.

Como ya nos ha pasado varias veces, a día de hoy cuando llega un caso similar hablamos con el cliente y preguntamos antes de presupuestar... ¿Tenéis un plan de empresa? ¿Tenéis un plan de comunicación? Porque el proyecto solicitado es de una envergadura importante y, a menos que lo tengas muy claro, si vas a invertir en una tienda online con la incertidumbre de que la oportunidad de negocio sea de éxito, más vale empezar con una versión sencilla inicial, porque la posibilidad de “tortazo económico” está a la vuelta de la esquina. 

La elección del momento en el que se lanza un producto puede suponer la diferencia entre su éxito y su fracaso. ¿Cuando lanzar una tienda online? Muchos podéis pensar que la respuesta es sencilla: cuando el producto esté perfecto. Pero nuestra experiencia nos dice que no es así. Hoy os quiero hablar de por qué es mejor lanzar un producto antes aunque todavía no esté del todo pulido.

El producto mínimo viable es un término que se ha popularizado junto a la metodología Lean, un modelo de gestión creado por Taiichi Ohno y que aplicó a Toyota. Su finalidad es ofrecer el máximo valor al cliente usando los mínimos recursos y eliminando “desperdicios” como la sobreproducción, tiempos de espera, transporte o exceso de procesos. Aunque hace décadas que la empresa nipona lo aplica, la metodología Lean ha empezado a ser empleada por muchas empresas a raíz de la publicación de El método Lean Start up de Eric Ries. Amazon es una de las empresas que ha apostado por él.

¿Qué es un producto mínimo viable?

Uno de los pilares de la metodología Lean es el concepto de producto mínimo viable (también conocido como MVP por su nombre en inglés, Minimum Viable Product).

Se trata de una versión del producto que quieres lanzar con un mínimo de características y desarrollado con el menor esfuerzo posible. Su finalidad es realizar un “escaneado del mercado”, analizar si es viable, si cubre las necesidades y recolectar toda la información posible de tus potenciales clientes.

En resumen, las claves de un buen MVP son:

• Que lo podamos fabricar y lanzar de forma rápida y barata.
• Que pueda llegar al cliente de forma rápida.
• Que nos permita medir sus resultados.

No lo debemos confundir con el prototipo, que sirve para comprobar las complicaciones de la fabricación. El producto mínimo viable sirve para comprobar si su venta es viable.

Se trata de un producto dirigido a los early adopters y ofrece grandes ventajas:

• Si la evaluación es negativa, habrás descubierto a tiempo que el proyecto no es viable, ahorrándote una gran cantidad de dinero.
• Si la evaluación es positiva, podrás aumentar la inversión con la seguridad de que la tu producto tiene potencial.
• Lograremos una gran cantidad de información que nos dará pistas sobre la dirección que debe tomar la evolución de nuestro producto.

El mejor momento: Cuando lanzar una tienda online

La búsqueda de la perfección en un eCommerce puede llevarnos a retrasar su lanzamiento, lo que puede causar que perdamos ventas o, lo que es peor, que la competencia se nos adelante. Nuestro objetivo debe ser acortar al máximo el tiempo de desarrollo de la tienda y lanzarla cuanto antes.

Hay diversas plataformas que nos permiten tener nuestro eCommerce activo de forma sencilla y rápida, como Shopify. Recurrir a ellas puede ser una forma de reducir tiempos y gastos y probar nuestro producto antes de realizar una gran inversión.

Una estratégia que os recomiendo si veis una oportunidad de negocio es la siguiente:

• Lanzar una tienda online con Shopify o  Woocomerce (WordPress), aunque ni el producto ni la web estén del todo pulidos.
• Lanzar una campaña en Adwords y en Facebook con públicos segmentados para dirigirlos a las fichas de productos.
• Tras un tiempo de prueba prudencial que nos permita tener un muestreo amplio -que pueden ser tres meses- analizar los resultados y tomar una decisión en consecuencia.

El objetivo de esta entrada es ahorraros tiempo y dinero. Si estás pensando en lanzar una tienda electrónica ¡no te retrases esperando a que esté perfecta!

Dejando de lado que nunca lo estará, es importante tener algo funcional y en evolución que te te sirva, además, como brújula indicándote hacia dónde ir, mucho mejor que no tener nada.

Espero que os haya servido.

En el próximo post te contaré los pasos a seguir para el lanzamiento de un eCommerce.

Hasta la próxima.