Quien monta una tienda online por su cuenta en estos tiempos debe ser un estratega, disponer de conocimiento de la tecnología actual, poseer una buena cuota de creatividad, mantenerse concentrado en las ventas y el rendimiento financiero de sus inversiones. Parece difícil, no existen muchas personas que combinen todas esas cualidades y por ello se cometen errores a la hora de elegir el hosting para ecommerce, en general un aspecto relegado.

No es la primera vez que escuchamos comentarios tales como ”no puedo escribir más en el blog porque ya no me queda espacio” y se abandona el proyecto. Una muestra del asesoramiento deficiente desde la empresa administradora de hosting.

Si es tu primera tienda online necesitas conocer cuáles son las diferencias entre los tipos de hosting disponibles en el mercado.
Un servicio de hosting de calidad significa ventajas directas para el administrador del sitio y a los usuarios de la web. Está vinculado con la velocidad de la navegación y, por tanto, a la experiencia de usuario, un factor también es beneficioso para el SEO.
Vamos por partes.

¿Qué es un hosting?

Es el espacio de alojamiento web online necesario en el funcionamiento de todo el site. Es administrado por una empresa que vela por el funcionamiento adecuado y seguro de la información contenida.

¿Qué es lo que debes saber sobre los hosting para ecommerce?

Los hosting por defecto ofrecen un espacio limitado respecto al contenido y a las visitas proyectadas. Si creces y llegan a tu web más visitantes de lo esperado, tu web caerá.
Elige, sobretodo al principio, una empresa que brinde atención al cliente 24/7 para solventar cualquier incidencia.

 4 tipos de hosting para ecommerce en el mercado

Hosting Compartido

El más económico y popular. Tu web compartirá recursos con otras web (memoria, IP). El volumen de tráfico del espacio compartido es limitado, si hay picos de visitas y llega al límite se ralentizará la velocidad de carga de tu web. Otra desventaja es que si detectan malware en alguna web con la que compartes espacio, el administrador del hosting puede poner en cuarentena el espacio y afectar el rendimiento de tu ecommerce o directamente poner en stand by tu web hasta solucionar el inconveniente.

Servidor VPS

Servidor privado virtual. En este caso te asignan una cantidad predeterminada de memoria y procesamiento por una partición de un servidor físico. La ventaja es que puedes aumentar los recursos tu mismo desde el panel de cliente si lo necesitas. Es más profesional y de mayor precio que el compartido

Servidor Cloud

Cuentan con mayor rendimiento frente a los VPS. Tu web se aloja en servidores virtuales. La idea es que el usuario utilice y se conecte al servicio en función de la demanda de recursos de su site y pague por lo que realmente utilice. Es independiente del hardware de alojamiento y, por lo tanto, escalable según necesidad.

Servidor dedicado

Tu ecommerce estará alojado en un servidor individual. Es la opción más profesional y con mayores prestaciones y a la vez la de mayor inversión. La gestión es más compleja y es posible que necesites de los servicios de especialistas para las modificaciones de configuración. La mejor elección si tu proyecto es ambicioso.

Como ves, la optimización de una tienda online conviene realizarla desde su inicio.
Si perseguimos el objetivo de vender desde el primer día, la estrategia de una mejor experiencia de compra de usuario es esencial y pasa también por la elección del hosting que mejor se adapte a tu ecommerce.