Es verdad que, si no tenemos clientes, no conseguiremos ventas. Pero, aunque no tengas el restaurante lleno todos los días, sí que hay una manera de subir tus ventas con los clientes que ya tienes. ¿Cómo? Seduciéndoles para que consuman los platos que más te interesan con marketing de restaurantes. Pero antes de empezar ¿Sabes cuáles son estos platos?

No todos tus platos son igual de rentables ni atraen por igual a tus clientes. Además, por mucho que tú te sepas tu carta de cabo a rabo, el cliente no se la va a mirar tanto y se quedará con los platos que le llamen la atención a primera vista. Por ello, tenemos que asegurarnos de que  los primeros platos que vea sean los que más te conviene. ¿Cómo se hace esto? ¡Aplicando marketing de restaurantes!

Marketing de restaurantes para mejorar tu carta y conseguir más ventas

A continuación te vamos a enseñar qué platos son los que más te interesa destacar en tu carta y por qué. Veamos: en una carta, a grandes rasgos, encontramos estos 4 tipos de platos:

1. Platos rentables pero poco demandados
2. Platos rentables que pide todo el mundo
3. Platos que no te salen a cuenta pero que sí que salen bastante
4. Platos que ni pide la gente ni te salen a cuenta

Evidentemente, los primeros platos que tienes que mostrar en la carta son los del número 2; así te asegurarás de que más o menos todo el mundo quedará satisfecho y que tú saldrás ganando.

En cuanto al número 1, antes de que cambies nada, intentaría analizar cuál es el motivo por el que la gente no los pide: ¿están muy escondidos en la carta? ¿Están mal explicados? Puedes probar a ponerlos una temporada en un lugar destacado de la carta, como por ejemplo "Sugerencias de la casa" y analizar los resultados al cabo de un tiempo para ver si mejoran.

Entre los platos del número tres quizá tengas algunos de los platos más demandados y que no puedes quitar; ok, no pasa nada, pero los pondremos debajo de los platos más rentables. Otra cosa que puedes hacer es realizar un ejercicio de creatividad y reflexión con tu chef: quizá el secreto sea cambiar ligeramente la receta para bajar los costes. Pero ojo, ten cuidado; no sea que por meter la tijera de más te vayas a cargar la esencia del plato y, con ella, su popularidad.

Por último, si tienes platos que ni gustan ni te dan dinero, cárgatelos y piensa en otros nuevos: así reinventarás tu carta y, quién sabe ¡A lo mejor das con un platazo estrella!

Otro punto interesante es mirar la forma en la que describes tus elaboraciones y aplicarle un poquito de marketing de restaurantes. ¿Cómo?  Una carta no solo es una lista de platos, sino una carta de presentación y la mejor arma que tienes  para seducir a tu cliente. Si hay algo que destaque de tus platos en su elaboración o ingredientes, inclúyelo: así el cliente apreciará más el plato y mejorará su percepción de calidad precio.

¿A qué me refiero? Por ejemplo, el restaurante italiano con el que trabajamos utiliza muchos productos con denominación de origen protegida, de pequeños y escogidos productores e importados de Italia. Es básico que informe de esto en su carta. No es lo mismo comerte una pizza con 4 quesos que podrías comprar en cualquier supermercado y embutido de calidad media que 4 quesos que tienen denominación de origen y han sido importados de los sitios de donde son típicos, que es donde los saben hacer bien y por ello han ganado su fama y reconocimiento.

Estos son solo algunos de los secretos de marketing de restaurantes que puedes aplicar a tu carta para subir ventas, pero existen muchos más. ¿Quieres conocerlos? ¡Contáctanos!