La importancia de la profundidad de campo en la fotografía de producto
Escrito por: Diligent Team
Seguimos adelante con el repaso que estamos dando a la fotografía de producto en estas últimas entradas. Hemos hablado de muchos aspectos muy distintos, desde el equipo que podemos necesitar hasta trucos de iluminación, desde fotografía con teléfonos móviles a los distintos tipos de objetivos que podemos necesitar para la fotografía de producto. Pero tenía la sensación de que estaba dejando de lado algo muy importante, y de eso es de lo que os quiero hablar hoy: la profundidad de campo en la fotografía de producto
Si alguna vez has visto una de esas fotos tan llamativas en las que un objeto destaca sobre el fondo porque este está desenfocado y la has tratado de imitar pero no sabes cómo, es que necesitas aprender más sobre la profundidad de campo. Lo mismo te pasa si quieres fotografiar dos objetos que están a una cierta distancia uno del otro y no logras que los dos te salgan perfectamente enfocados.
Se trata de uno de los aspectos de la fotografía que nos permite realizar más juegos y también una de las principales herramientas que tenemos para guiar la vista del espectador. Y si lo que quieres es realizar fotografía de producto, también es primordial que la domines.
Qué es la profundidad de campo
En esencia, la profundidad de campo es el espacio que tenemos delante y detrás del plano que enfocamos. Es decir, con una profundidad de campo grande podemos obtener una fotografía con gran detalle en todo lo que aparece en la imagen, desde el primer plano hasta el horizonte, mientras que con una profundidad de campo pequeña podemos conseguir que solo un objeto esté enfocado con el resto de la imagen desenfocada. Este es un efecto muy usado en retratos, el llamado bokeh.
Para este caso pongo como ejemplo el rostro de una chica.
¿Ves como todo el fondo está totalmente desenfocado?
Técnicamente hablando, únicamente un punto de la imagen puede estar perfectamente enfocado, todo lo demás estará desenfocado, aunque sea ligeramente. De todos modos, este hecho es imperceptible para el ojo humano, que solo lo notará cuando realmente el objeto esté muy desenfocado. Es el llamado círculo de confusión.
Qué influye en la profundidad de campo
Principalmente hay tres elementos que afectan a la profundidad de campo. Son los siguientes:
- La apertura del diafragma: cuanto mayor sea la apertura, menor será la profundidad. Por ejemplo, con un f/2,8 puedes tener una profundidad de apenas un metro, mientras que con un f/22 puedes alcanzar hasta 5 metros. Con un f/1,4 puedes sacar un retrato con la nariz enfocada y las orejas desenfocadas. Recuerda que, por poco intuitivo que sea, cuando menor sea el número f, mayor será la apertura.
- La distancia focal: el zoom es otro aspecto que influye directamente en la profundidad de campo. Cuanto mayor sea, menos tendrás. Por lo general esto es conveniente, ya que si usas zoom es precisamente porque quieres centrar la atención en un objeto, mientras que con un plano abierto normalmente buscas fotografiar todo un paisaje o estancia. Si quieres una imagen con una gran profundidad de varios metros, deberías buscar usar un 35mm o menor, mientras que si quieres que esta sea pequeña, puedes recurrir a un 100mm o mayor.
- La distancia física entre la cámara y el objeto enfocado: otro aspecto a tener en cuenta. Cuanto más cerca estés del objeto, menos profundidad de campo tendrás, mientras que si te alejas, esta se irá ampliando.
Consejos sobre la profundidad de campo en la fotografía de producto
Un aspecto muy importante que debes tener en cuenta es que no es lo mismo ver una fotografía en la pantalla de la cámara o del móvil que en un monitor de gran tamaño. En muchas ocasiones nos podemos encontrar con que una fotografía que parece perfectamente enfocada en la pantalla al pasarla al ordenador no lo está tanto. Para evitar sorpresas, hay dos consejos básicos:
- Tener en cuenta el tamaño al que vas a usar la fotografía. Si solo la necesitas en formato pequeño, puedes ser más tolerante. Si la necesitas en grande, tendrás que precisar más y realizar varios disparos con parámetros ligeramente distintos por si alguno sale mal.
- Hacer zoom en la pantalla de la cámara para asegurarnos de que todo lo que necesitamos está enfocado adecuadamente.
Y si realmente necesitas ser muy científico, siempre puedes recurrir a algunas de estas calculadoras de profundidad de campo, en la que, introduciendo los parámetros, te indican el espacio que tendrás para enfocar:
Espero que esta entrada os haya servido para aclarar dudas básicas sobre la profundidad de campo en la fotografía de producto.
¡Hasta la próxima!
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